Por el atajo

Por El Atajo/Pelo atalho/Del Libro Sabor Dominicano/Otto Oscar Milanese

Devora soledad por el atajo,

viene de sembrar la fe y las manos en un surco del conuco.

Rota la vida en los bolsillos del pantalón raído,

rota la voz que a ratos canta ratos de miserias,

con el alma hollinada por las piedras del fogón.

Para lavar el estomago cuela un café la mañana,

para besar al olvido un trago de mamajuana trae la noche,

y a lomos de la burra, sombrero de paja, machete y chancleta,

se confunden en una sola sombra detrás del pachuché.

Muere el sol sobre burra y campesino,

aguardan cuatro horcones de un bohío que se derrumba,

espera un patio lindero al olor del cundiamor,

y una silla de güano que recibe el cansancio

que se desahoga ahogándose en un trago de ron.

Pelo atalho.

Devora solidão pelo atalho,

vem de semear a fé e as mãos num sulco da terra.

Rota a vida nos bolsos da calça puìda,

rompida a voz que às vezes canta momentos de misérias,

com o alma fuligemada pelas pedras do fogão.

Para lavar o estômago cola um café a manhã,

para beijar ao esquecimento um trago de rum traz a noite,

e a lombos da burra, chapéu de palha, machete e alpercata,

confundem-se numa só sombra por trás do charuto.

Morre o sol sobre burra e camponês,

aguardam quatro muros de uma casa que se derruba,

espera um pátio linde ao cheiro do *cundiamor,

e uma cadeira velha que recebe o cansaço

que se desafoga afogando-se num trago de rum.