martes, 26 de febrero de 2008

Dos Sombras/Duas sombras/Del Libro Al Lado De La Vida/Otto Oscar Milanese

Dos Sombras/Duas sombras/Del Libro Al Lado De La Vida/Otto Oscar Milanese


Dos sombras hay en el mundo,

una se queda,

la otra se va.

Sombra es el sueño del hombre en donde le toque vivir,

la gente que ayer soñó vivió sin tocar el sueño,

y salió de la vida dejando sombras detrás,

sombras, que alcanza otro aliento,

sombras, que busca otra imaginación,

para que hoy también pase la gente que sueña,

con su afán de realidad abrumada de fantasías.

¡Oh, sombra vida de gente,

tú eres la que se va,

dejando en el mundo sueños!

¡Oh, sombra de vida ilusa,

el sueño no roza sombras que se atreven a soñar!


Duas sombras.

Duas sombras que tem no mundo,
uma remanesce,
a outra parte.
A sombra é o sonho do homem onde quer que o homem fiquei,
as gentes que sonharam ontem viveram sem tocar no sonho,
e saiu da vida que deixa sombras atrás,
sombras, que alcança outro fôlego,
sombras, que procura outra imaginação,
de modo que hoje também passe as gentes que sonham,
com sua ânsia da realidade esmagada dos fantasies.
Oh, sombra vida da gente,
você é essa que parte,
deixando no mundo sonhos!
Oh, sombra da vida ilusa,
o sonho não roça sombras que ousam sonhar!

Río De Voces/Del Libro Al Lado De La Vida/Otto Oscar Milanese

Río De Voces/Del Libro Al Lado De La Vida/Otto Oscar Milanese


“O poeta é um fingidor,

finge tão completamente que chega a fingir,

que é dor, a dor que deveras sente”.

Fernando Pessoa


Río de voces.

Otto Oscar Milanese

caer en el abismo de un silencio,

surgir a la luz lloviznado de palabras.

Desatar cada emoción que se enredó a los sentidos,

y atar entre pausas la arrítmia de un corazón

que osó hacerse canto de la vida.

En la carne del cansancio yo te encuentro,

Sufrimiento acosado de frases,

que son disfráz,

son desnudez,

y son espejo

del tiempo que transita por tu alma.

Navegando el dolor sobre el río de tus voces,

te hace poeta el verso que nos besa

todo rincón de conciencia dormida,

y despierta en la herida de los días,

la pasión que te amó para cantarse,

el motivo de contar que fue el segundo

de la palabra manchada de vida y sueños.

Sombra De Vida/Del Libro Presentimiento Metapoético Del Corazón/Otto Oscar Milanese

Sombra De Vida/Del Libro Presentimiento Metapoético Del Corazón/Otto Oscar Milanese


Tantas noches,
sólo he sido el intento de escribir el alma.

Pero en tantas noches,
Anonimamente oscura, la voz que me identificó,
en su olvido de medir versos,
encontró longitud de alma.

Y con mi andrajo de alma subí a cada sueño que insufló
la noche,
intuyendo en el ser del silencio,
el amor por la palabra que eludió la mediocridad.

Y me ha arrojado al mundo siendo llaga,
la voz que me ha latido a corazón,
para que no viva en el verso que es entraña de imposibles,
para que no confunda el acento
de los sueños de alma sobre el amor,
para rozar humanidad en la sombra de vida que persigo,
ese rumor que habitando en mi propia sombra,
crece y late en donde no mira ni sueña el corazón.

Monólogo Con El Corazón/Del Libro Presentimiento Metapoético Del Corazón/Otto Oscar Milanese

Monólogo Con El Corazón/Del Libro Presentimiento Metapoético Del Corazón/Otto Oscar Milanese


Recuerdame lavar con luz de sol,

la cotidiana mordida de hastío que nos hostiga,

déjame ser en ti la aventura de existir,

abriendo heridas de mundo en donde tu sueño acaba,

para que seas voz de mi mismo,

he de erigirme en inventario de tus vivencias,

para que cada latido abra la ruta del aliento,

y en mi aliento repitas el alma del amor;

pero, si en la voz de mis días envejeces,

y en mi sombra te cansas,

entregale a la vida la noche en que mas te sentí,

para que el mundo nos cobre lo que nunca fue nuestro,

y latiendo en mi carne agrupes las razones

que sin apegarse a lo mundano nos enseñan a partir.

Tierra De Mis Viejos/Del Libro Cantos Azuanos/Otto Oscar Milanese

Tierra De Mis Viejos/Del Libro Cantos Azuanos/Otto Oscar Milanese


Tierra de mis muertos,
voz de aguaceros en mi larga sequía,
tierra del pasado de mis huellas,
sombra que fue infancia sobre el viento,
alma que ha llevado aherrojadas ganas
en la sal del tiempo que secó mis días.
Fue caribe el sueño de este corazón,
fue brisa de antilla, y fue olor del horno
que entibió miserias tiznadas de carbón.
Es tierra de mis viejos,
y es tierra mía,
y es tierra de espejos que opaca el aliento de mi voz de isla.
Es la excitación del viento en las palmeras,
tropical orgasmo de arenas y sol,
voz de la distancia que en mi ausencia grita
la añoranza de cada rincón que me asedia el alma,
para andar la vida sin salir de allí.

De Azares Y Momentos/Del Libro Necesito A Veces No Necesitarme/Otto Oscar Milanese

De Azares Y Momentos/Del Libro Necesito A Veces No Necesitarme/Otto Oscar Milanese


Todo parte desde mi, para mi.
Luego del yo no habrá otro ahora,
la vida continuará sin mi,
¿pero quien me lo hará saber cuando no esté?
Soy,
es todo lo que importa,
y en mi acabo todo lo que es comienzo,
todo lo que es final muerde mi alma;
soy,
es todo lo que siento,
me derramo sobre la vida como instante,
me desvisto de mi con los momentos.
Y estoy,
es todo lo que me hace,
un hombre en el destino que me caza.

Ojo De Mundo/Del Libro Cantos Comprometidos/Otto Oscar Milanese

Ojo De Mundo/Del Libro Cantos Comprometidos/Otto Oscar Milanese


De noche,
el corazón es un eco de la diurnidad transcurrida,
la madrugada del silencio vela desde el vientre de tu mirada.
Vigilas,
insomne,
inmutable pupila de lo infinito.
Amanece,
amanece en el vuelo de la gaviota,
una aurora de sol se baña de olas en la inmensidad desolada,
espejos de parajes,
soledad de las huellas que olvidaron a sus dueños.
Velas desde la nada,
dame mundo,
para emerger húmedo de humanidad
al despertar de las sombras y los ruidos,
para oradar con el sueño la promesa de tantos mañanas,
renovando un presente acentuado de hombre,
vestido de afán.
Acechas,
y en tus retinas me repito,
multiplicando el absurdo que identifica mi ineludible realidad.
Ya soy voz y movimiento,
motor y marcha,
reloj de minúsculas casualidades,
suma de dias y destinos,
acechas,
ya soy muerte implicita en lo que vivo,
y tú,
desde siempre un ojo que escudriña mi temporalidad
.

Momentos Y Rostros/Del Libro Cantos Comprometidos/Otto Oscar Milanese

Momentos Y Rostros/Del Libro Cantos Comprometidos/Otto Oscar Milanese


1.

Mañanera usuaria del tren.

Esa mujer, café en manos,
que desdobla sin premuras las noticias,
la que a un último vagón se ha montado,
a primeras horas de sus rutinas.
Esa mujer que entre los ojos,
se traza un calendario de fatigas,
la que lleva un corazón mordido de horarios
bajo la piel lavada que Eternity respira.

2. El momento del quarzo.

Ese palpitar cambiante de minutos de quarzos,
te despertó,
y me arrojó de la cama,
nos arrojó sobre la boca rutinaria de la cotidianidad.
Latió la carne,
sufrimos la metamorfósis reglamentada por el horario,
y ya no fuiste tú,
dejé de ser yo,
fuimos prisa de pasos hacia el tren,
amalgama de rostros arrastrando un maquillaje de fatigas.

3. Cara de haitiano rumbo a los campos azucareros.

Te veo pasar, hermano haitiano, por mi pueblo,
llevándote el camión a donde quiso la miseria,
te veo pasar sin equipajes, y al regreso,
entre los ojos he de mirarte la tumba de otro sueño.
Y crece, haitiano amigo, entre nosotros,
una muerte emborrachada por la caña.
El viejo barracón que te escupió soles de fatigas,
sabe que tu sufrimiento es otra zafra;
esa zafra de menosprecios recibidos
que no se pesa en quintales
ni sale por el puerto;
una zafra de palos que te saca el canto en creole,
para que tus exangües manos negras
suban, y suden,
bajen, y suden
con la caña cortada
y no se agoten los trajines del ingenio.


4. Momento de salir.

Salir a la calle, no es siempre salir a la calle.
Se sale a la llovizna de un atardecer,
o al mediodía de un trópico,
o al viento de un invierno.
Se sale al compromiso de remedar la vida que se ha vivido ayer.
Salir a la calle, no es unicamente salir a la calle,
se sale a los olores,
al sol, al aire,
y a la cotidiana muerte de los pasos con su pasado de huellas.
Se sale al horizonte,
al futuro que enneblinan las cancerosas bocas de un millón de chimeneas
se sale a tiempo al tiempo que nos fijó la muerte.

5. Rostros ciudadanos.

Miremosnos bien,
parecemos exactamente lo que somos
sombras de pobres diablos,
adormecidos por la religión
y repetidos por la historia.
Miremosnos bien,
que no vamos a ir mas lejos
de encerrarnos a vivir con nosotros mismos,
con el olor de un amor entre los libros
y una inconsciente despedida para cada minuto.
Miremosnos bien,
que malamente alcanzamos a conocernos,
a pesar de la tarjeta de identidad,
y a los compromisos cumplidos diariamente,
a pesar del nombre con que nos nombran otras bocas.
Miremosnos bien,
y contemosnos entre los manipulados,
que buenamente pasamos por imbéciles,
un voto perseguido
y una voz desoida,
ciudadanos.

6. Momento detrás de una ventana sin futuro.

Detrás de esta ventana se dísputan la noche
la lluvia y el incesante ruido de los automoviles.
Detrás de esta ventana se pelean las calles,
los pasos y las sombras, las intenciones y las voces.
Dejad una ventana que se llene de luna
o de un principio de mañana llegando con el sol,
dejad una ventana que no ensucie el aliento
de veinte mil rutinas que vuelven a ser hoy.
Detrás de esta ventana comienza el progreso,
han roto sus cristales la enmarañada enredadera de la civilización,
rostros que maquinan el futuro,
transacciones,
estipendios,
factibilidades,
dejad que esta ventana se abra a la sonrisa
de un pobre amigo sin tarjetas de créditos,
dejad que esta ventana sea principio del vuelo,
que ignorando los planes, se contenta con ser sueño.

7. Rostro de sombra quinielera.

Alma de sueños y azar,
semanario de ilusión
que vende probables sonrisas
por un seguro sudor.
Entre las calles y las plazas
vagan los números de tu voz,
y la pálida fatiga,
y el hambre de porvenir,
van contándose miserias circulando en el reloj.
Andas vendiendo suerte, quinielero,
la sombra de tu alma es lotería
que vende premios por el precio
que deja la mesa de tu hogar siempre vacía.

8. Momento de ordenar.

Para que ordenaras el día ofreció la orden
desde la pulcra oficina de siempre,
desde el confortable reclinamiento en la butaca tras el escritorio,
y la voz huyó despersonalizándose a través de cables invisibles,
y fue obedecida, cumplida,
como cumplen los dedos secretarios sobre el teclado de las computadoras,
como cumple el enjuto mensajero que lleva y trae sobres lacrados,
o como cumple el día
con su circunspecto rostro de acida burocracia.

9. Rostro de una Altagracia.

El milagro de Altagracia es tan corriente,
cuatro hijos paridos y otro que viene;
pero la hermana allá en Azua
le envidia la suerte
de atrevesar el Canal de La Mona
burlando a la muerte.
La vida de Altagracia poquitos sueños tiene,
un marido que en fábricas
quema la vida por cheles,
y el walfare que la ayuda
al final no resuelve
esa suma de deudas que ambos pagan los viernes.



10. Momento de un sueño que se corta.

Duermes.
Un niño sueño juguetea sombras por tus parpados.
Un niño sueño es la única alegría que se asoma a mi.
Parado frente a tu cuna,
mi carne es un miserable sufrimiento,
un dolor a vida huyendo por las arterias,
parado frente a tu cuna,
todo el llanto se resuelve
en una tardía lágrima del Universo.
No te salgas del niño sueño que arropa tu sonrisa,
mas allá vive el hombre
y las miserias,
el trote pautado por los relojes,
mas allá,
han erigido murallas de razones,
y la soterrada muerte de existir.
No te salgas del sueño, cuna adentro
habita la única inocencia desmaquillada,
entre tus mantas vive el sueño sin apuros,
no te salgas..., mas allá sólo hay grises batallas diarias;
pero el sueño de la vida te despertará
a la prisa del reloj y a las rutinas,
a ese carnaval de mascaras y disfraces,
que maquillado de aberraciones y de incongruencias,
es la cara de Dios cuando lo abruma
la pesadilla del juego que inventó.



Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera.../Del Libro Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera/Otto Oscar Milanese

Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera.../Del Libro Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera/Otto Oscar Milanese

Un pie sobre la tierra,
sobre la mansa herida de la tierra:
los dos pies,
y se llenaron de ríos las pisadas,
para buscar el rumor,
el sencillo rumor,
de las sombras que no puede mojar el agua.
Y así van pies y pisadas,
sobre la mansa herida turbia del rumor,
como si fueran ríos que van hacia las brumas de la nada,
pies y pisadas son las sombras asombradas,
de latido y corazón.,
y calla el rumor de aguas en las orillas,
para besar el silencio de caminos y huellas,
que alguna vez fueron corazón,
de todo lo que en el mundo se aleja.
Reconozco que no puedo ser mas de lo que he sido,
gladiador de rutinas,
nocturno acento de nostalgias,
hijo del verso que suda las voces de las calles en el alma.
He andado,
mis pies son un tatuaje de calles,
mis pies son un lenguaje de distancias.
He andado,
fui sombra de otros pasos,
fui paso tras otras huellas,
para volverme esquina, mercado, portal y plaza,
siempre fui tras los pasos de mis pasos,
para alcanzarme,
para retratar la vana persecución,
de querer pisar la vida con el alma.
Cansancio ayer mío,
hoy hastío de nostalgias,
por estas calles barridas de amor y de fatigas,
tu sombra es la atadura que me une a los cementerios.
Mi cuerpo es llave de corredores infinitos,
apenas me siento en la soledad del Cosmos,
como un segundo de historia anonimata.
Porque fui jinete de la brisa,
y el amador amado entre la noche y la palabra,
fui el amante furtivo de ciudad hipocondríaca,
fui un buzón de malas nuevas llamado corazón,
porque fui de tus calles, sin abandonar las mías,
y en los momentos de tus manos fui un aleteo de tiempos,
instante de existencia entre papeles,
letargos de auroras en los dedos,
para tener la estatura del amor que tú has amado.
Y heme aquí,
con la razonada necesidad de usar reloj,
con tu apuro de llegar temprano,
con la contaminación de mi carne,
mirame aquí como una multitud empujada
hacia el vicio de las repeticiones,
mirame aquí, humano y con Dios,
y con lenguaje, con sueños y direcciones,
mirame con mi propia humanidad,
reducida a las cifras del salario.
Si has dicho quererme alguna vez,
recuerdame el olor a vientre de donde vengo,
para que cada pisada aborte un corazón,
y el alma sea una ventana colgada de los aguaceros,
porque antes del rumor...
mi pecho fue el desierto en donde empezaste a erigir,
levantame, pues, como hombre,
de entre tus escombros metropolitanos,
porque ese es todo mi valor,
sin estadísticas, sin Wall Street,
porque a la medida de cada hombre
va creciendo una muerte, un destierro de ganas,
un asilo de olvidos,
apenas hemos sido, sin saber que ya no somos.
Somos de estas calles, y de estos pueblos,
somos de estas muertes y de estos héroes,
de las guerras rutinarias que asoman en cada amanecer.
Hombre,
este aliento de dolares y de chimeneas,
no es el aliento de la existencia,
este pulso de trenes y de horarios,
no es el latido del amor.
Hombre,
tu espejo no es cristal frente al cual te peinas,
tu espejo es otro hombre por las calles...
Por vivir: amar, luchar, respirar,
ser calle de los vientos, y de las soledades que arman al silencio,
dejar tras la existencia huellas que sangran sueños,
ser la cotidianidad o el absurdo,
la costumbre hacia un jefe, y el respeto a los salarios,
y ocupar toda la vida, así viviendo ratos,
con un Dios que nos escucha
miserias y fracasos.







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#1 Comment from elazuanoazul07 Blog Author
7/3/05 9:25 PM
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De:: Ike Méndez
Fecha:: sáb may 10, 2003 7:03 pm
Asunto:: A proposito de Otto Oscar Milanese. ike_mendez
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Creo con humildad que las voces desatadas de Otto Milanesse son la expresión genuina de un escritor que toma muy en serio la producción literaria.
Escribe cuentos y poemas de forma elocuente y con tono en acuerdo a la pasión con que los escribe, descubriendose en ellos como como es. Sin dificultad intelectiva se siente su sensibilidad sus emociones y fuerza creadora crecida en el verso.
Entiendo que con facilidad Otto tomará y dominará la técnica literaria, los postulados y estetica de la metapoesia.

Propongo que se acepté como miembro del MIM y que desde ya se le suministre la mayor información acerca del Movimiento.

Ike Méndez

Corazón de luz

Corazón de luz/Otto Oscar Milanese


Quiero tomar la luz en la palabra,
un corazón de luz abrir por donde pisas,
y con labios de versos inéditos,
que cuente el amor cuanto te ama mi alma.
Quiero pintar mi sombra de tu boca,
y romper con tu nombre la distancia,
que tu sueño me sueñe como soy,
desde que a ti te sueña mi palabra.

Corazón de luz

Corazón de luz/Otto Oscar Milanese


Quiero tomar la luz en la palabra, un corazón de luz abrir por donde pisas, y con labios de versos inéditos, que cuente el amor cuanto te ama mi alma. Quiero pintar mi sombra de tu boca, y romper con tu nombre la distancia, que tu sueño me sueñe como soy, desde que a ti te sueña mi palabra.

Coração da luz/Del Libro Versería Del Sentimiento/Otto Oscar Milanese

Coração da luz/Del Libro Versería Del Sentimiento/Otto Oscar Milanese



Quero tomar a luz na palavra,

um coração da luz abrir por onde pisas,

e com ondas dos versos inéditos,

que conte o amor quanto te-ama minha alma.

Quero pintar minha sombra da tua boca,

e romper com teu nome a distância,

que teu sonho me-sonhei como eu sou,

desde que a você a sonha na palavra.


Ainda você é/Del Libro Versería Del Sentimiento/Otto Oscar Milanese

Ainda você é/Del Libro Versería Del Sentimiento/Otto Oscar Milanese


Ainda você é.

Teve seu cheiro a vida,

e mas lá dos meus sentidos a vida mesma foi você.

Assim como brota um sorriso e se-esfuma,

tudo o que você me-deu nasceu pra morrer.

Você deixo-me um passado,

uma porta aberta as saudades,

e um nome pra meu pensamento,

você deixo-me um sentimento que já não a roça,

e êste esforço do canto procurando recobrar a você,

já sem corpo,

já sem pele,

porque ainda você é,

a vida que se-respira e não se-toca

La Imagen/Del Libro Presentimiento Metapoético Del Corazón/Otto Oscar Milanese

La Imagen/Del Libro Presentimiento Metapoético Del Corazón/Otto Oscar Milanese


A veces,
este corazón fue isla en la mar de sus momentos,
y si soñó fuera de mi,
me arrastró en su marejada de emociones;
viento de vida que latió en cada rostro de sus sueños.
A veces,
En toda esquina del silencio que habité,
un saludo de instantes reconoció mis limites,
y fui en la prisa de los días un espacio para las costumbres,
un tiempo irrepetible,
un hombre parecido al hombre que ayer fui.
Me hice visible en el espejo de mi existencia,
Me fue matando el día que vida me entregó,
a veces,
este corazón que sólo supo de presentes,
una imagen de angustia reflejó sobre el rincón
en donde fue creciendo el rastro de lo absurdo.

Metapoema Del Sueño/Del Libro Presentimiento Metapoético Del Corazón/Otto Oscar Milanese

Metapoema Del Sueño/Del Libro Presentimiento Metapoético Del Corazón/Otto Oscar Milanese


Soy alma,
arteria de un verso irracional,
sueño que escribirse sueña en la vida del verbo,
mil veces sombra intuitiva sobre un corazón multiplicado.
Y no sé cual ha sido mi locura,
si atropellar un mundo de sueños en la realidad insomne,
o entregarle al alma fugitiva de mis realidades
un corazón de sueños .
Pero soñé noches en la noche que me ama,
y en la noche del destino fui el desliz de una palabra
enamorada de algo mas que su propia poesía,
porque fui el vuelo de mis ojos cuando sueñan,
llegué mas allá de las fronteras que me dio la realidad,
y ya no hubo noches en las ficciones de mis muertes,
cruxificados por auroras se humanizaron mis sueños,
para ser huella de vida en todo lo que alienta,
y en todo lo que el sueño roza
dejar abierto el surco de mi cotidiana humanidad.

Necesito A Veces No Necesitarme/Del Libro Necesito A Veces No Necesitarme/Otto Oscar Milanese

Necesito A Veces No Necesitarme/Del Libro Necesito A Veces No Necesitarme/Otto Oscar Milanese


Tendido sobre palpitaciones nocturnas

me reedita la noche en las memorias;

vaharadas de tiempos concluídos

me arrojan a la vida de las calles,

tatuada de almas trémulas, la piel

es un llanto disfrazado del olvido.

Voz: lluvia de rasguños

que brotando del andrajo de las penas,

engalanan de frases pordioseras a este papel.

Voz: espacio para la sombra del alma,

cuando el alma es un reclamo desoído.

Yo soy de las calles

y son callejeros

los acentos de crepúsculos que me arriman a la angustia.

De calles y miserias

es el mañana de mis ojos,

un sueño bostezado en las esquinas,

un diario subsistir de humanidad.

Escarbando a dentelladas noches idas,

todo lo que rozo es la resaca

de un puñado de sensaciones infinitas,

latigazos de auroras similares

es el aliento que me asombra de existencia,

como un cansancio del invierno a plena calle.

Necesito a veces no necesitarme,

irrumpir con ciega rabia a la cotidianidad,

lavar mi voz de hombre con los ecos de la infancia

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  • #2 Comment from elazuanoazul07 Blog Author
    7/3/05 9:19 PM
    | Permalink

    Apreciado Orlando, lo que creo que no sabes aún, es que te estás
    convirtiendo en la primera persona que analiza lo que escribo, y
    creeme, amigo, mi corazón se alegra cuando alguien con
    características espirituales, como las que te son propias, se
    interesa por lo que escribo. Orlando, la palabra en la que reparas,
    realmente era "excavando", pero uno de mis dedos deseó jugar con
    alguna r, de todas maneras, bien podría ser como
    sugieres, "escarbando". Cuidate amigo, y no pierdo la esperanza de
    estar con todos ustedes para el próximo Congreso de La Metapoesía.---

    En Metapoesia@yahoogroups.com, "Orlando Alcantara" escribió:
    > Bueno, Otto, la botaste con este poema que se acerca mucho a meta-
    poema. Veo que oscila entre poesía tradicional y metapoesía. El uso
    del plural a lo largo de todo el texto es uno de sus rasgos
    distintivos que le dan unidad y coherencia sígnica. La
    palabra "excarvando" me parece que debe ser "escarbando". Este texto
    tiene muchísima garra y muchísima malicia escondida en sus adentros
    en el sentido que es urticante e incisivo como es toda tu producción
    que conozco hasta ahora, Otto. Sinceramente, mi dilecto amigo y
    camarada Otto, que tu ensayo en cualquier momento puede convertirse
    en todo un libro ensayístico sobre tu poesía desgarrada, desgarrante
    y desgarradora. Estoy enamorado de esa voz que me visita todas las
    noches con su óntico pernoctar y su teleológico atisbo hacia el
    interior del ser humano. Ese eres tú, Otto, compañero del alma,
    Quijote metapoético, porque hasta la Metapoesía ya ha producido en ti
    su propio Don Quijote. A mí déjame ser Sancho Panza, por favor,
    Jorge Piña. Joel, no te pongas guapo, pero tú sigues siendo un
    típico Compadre Mon cualquiera. A Jorge Piña le corresponde ser el
    Licenciado Vidriera con todo y su paranoia incurable. Bendiciones
    amánticas en Cristo Jesús! Cristorly
    >
  • #1 Comment from elazuanoazul07 Blog Author
    7/3/05 9:16 PM
    | Permalink
    De:: "Orlando Alcantara"
    Fecha:: mié may 28, 2003 1:36 am
    Asunto:: Otto, un libro dioscristo
    Sin conexión
    Enviar correo-e

    Gracias, Otto, por tus palabras. Acuérdate que tu poesía me está gustando
    tanto que cada vez que me acerco a ella pienso en un libro futuro que
    estudie en detalle todos sus vericuetos. Es sólo una idea leve por el
    momento, pero en verdad atrayente. No sabemos qué nos trae Dios en el
    camino, pero para mí sería un altísimo honor ser el autor de ese libro
    ensayístico, pues tanto tu poesía como la mía tienen raíces comunes en sus
    registros. Si prestas un poco de atención a mis poemas, te darás cuenta que
    en cierto sentido tienen un entronque común. Se parecen. Felicidades en
    Cristo Jesús amántico, atámbico y grácil! Cristorly. Otto, a sueldo fijo
    te amo! Ese es nuestro lema metapoético. Nuestra marca de fábrica.
    Firma:

    Participe en el portal RESUJESUS (http://resujesus.com).
    (Negocio Cristiano Gratis y Comunidad Creativa Cristiana)

    "Te remito al fondo de mi E-Mail
    Para que en mi página Web
    Hagas click en mi fotografía."

    ¡A SUELDO FIJO TE AMO!
    Libre Albedrío para el Cristiano y "Libertad Arbitraria" para el Incrédulo.
    La Fe Soteriológica y Sinérgica NO es una Obra según Romanos 4:5.
    La Gracia Soberana y Teónoma de Dios en la Obra Terminada de Cristo.
    Responsabilidad tuya y mía en las Obras Monérgicas y Deontológicas en
    Jesucristo.
    La Iglesia del Nuevo Testamento en las casas principalmente.
    (Romanos 1:17-4:5; Hebreos 11:6; Santiago 2:13; I Corintios 3:15; II Pedro
    3:9; Romanos 11:32-12:3). ¡Aleluya! ¡Hosanna! ¡Gloria a Dios! ¡Amén!
    ¡Felicidades en Cristo Jesús amántico, atámbico y grácil! Cristorly.

    Orlando Alcántara (Escritor, Inventor, Traductor y Asesor)
    Avenida Constitución No. 102,
    San Cristóbal, República Dominicana.
    Teléfono: 1 (809) 528-0168.

Beso Vida/Del Libro Versería Del Sentimiento/Otto Oscar Milanese

Beso Vida/Del Libro Versería Del Sentimiento/Otto Oscar Milanese


Vida amante es el beso que da tu boca,
flor de piel que se abre para el deseo,
boca y deseo es el mundo en donde mora,
el amor que en mi boca sabe a tu nombre.
Perseguido de auroras llegué a tu día,
para ser en tu día lo que soñaste,
antes del instante que nos amó.
Y buscando en el alma de tus secretos,
desnudé lo que fui para ser tuyo,
y sumé a tu sonrisa lo que me salva,
y a tu paso amarré el porvenir,
para que permanezca en tus ojos, lo que en mis ojos,
atrajo al beso de vida que nos unió.

De Paso II/Del Libro Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera/Otto Oscar Milanese

De Paso II/Del Libro Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera/Otto Oscar Milanese


De paso, un mundo llevo en cada instante,
lo que respiro,

el alarde de vida que lastima,

el olor de la noche que me sume y me suma

a un ser de irracionales costumbres colectivas.

De paso,

yo vengo de paso en el murmullo de todo lo que siento para ser,

porque subo del silencio,

y el silencio me enrostra,

cada frase que me viste de mentiras.

De paso,

vengo de paso,

reduciéndose mi humanidad sobre la tierra

al sonido de un reloj.

Pasando,

me voy quedando en mi sin lo que era,

pintando de futuros las rutinas,

suficiente limosna para la existencia

que mendiga la repetición de otro amanecer.

Vida/Del Libro Al Lado De La Vida/Otto Oscar Milanese

Vida/Del Libro Al Lado De La Vida/Otto Oscar Milanese


Vida,
aguacero de tiempos irrecobrables,
en mi cuerpo la cita de vulgares vivencias,
que latiran en la nostalgia como dolor inconcreto.
Vida,
un refugio de instantes que me van dando cara,
y un abrazo de muertes en el rastro de los días,
el vacío que deja el sabor de lo alcanzado,
en la angustia soterrada de enfrentar nuevos retos.

Sombras Diluídas Al Ocaso/Sombras diluídas ao ocaso/Del Libro Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera/Otto Oscar Milanese

Sombras Diluídas Al Ocaso/Sombras diluídas ao ocaso/Del Libro Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera/Otto Oscar Milanese


Sombras diluidas al ocaso
son las manos que ya no recuerdan amar;
pero a la sombra de cualquier distancia,
las ciudades se reeditan en los ojos,
y la nostalgia que asfixia el alma
es una avenida hacia la nada...
...Cuando la oscuridad es un latido entre dientes,
el sabor de la vida es una rabia
que retiene lo que la inconformidad no supo apresar,
es cansancio de alma que no encuentra su sombra,
hostilidad de un silencio que ya no sueña mas.

Sombras diluídas ao ocaso.

Sombras diluídas ao ocaso

são as mãos que já não recordam amar;

mas à sombra de qualquer distância,

as cidades se reeditam nos olhos,

e a nostalgia que asfixia o alma

é uma avenida para o nada...

...Quando a escuridão é um latido entre dentes,

o sabor da vida é uma raiva

que retém o que a inconformidad
e não soube apresar,

é cansaço de alma que não encontra sua sombra,

hostilidade de um silêncio que já não sonha mas.

Rumor adentro e outros cantos de vida pra fora/Del Libro Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera/Otto Oscar Milanese

Rumor adentro e outros cantos de vida pra fora/Del Libro Rumor Adentro Y Otros Cantos De Vida Afuera/Otto Oscar Milanese


Um pé sobre a terra,

sobre a mansa ferida da terra:

os dois pés,

e encheram-se dos rios as pisadas,

para procurar o rumor,

o simple rumor,

das sombras que não pode molhar na água.

E assim vão pés e pisadas,

sobre a mansa ferida turva do rumor,

como rios que vão pra as brumas da nada,

pés e pisadas são as sombras assombradas,

da batida e coração,

e cala o rumor das águas nas bordas,

para beijar o silêncio dos caminhos e trilhas,

que alguma vez foram coração

de todo o que no mundo se afasta.

Eu reconheço que não posso ser mas do que hei sido,

gladiator das rotinas,

noturno acento das saudades,

filho do verso que sua

os gritos das ruas na alma.

Eu hei andado,

Meus pés são um tatuagem das ruas,

meus pés são um linguagem das distâncias.

Eu hei andado,

fui passo além de outras trilhas,

para voltar-me esquina,

mercado,

porta

e praça,

sempre fui além dos meus passos,

para me-alcanzar,

para retratar a vã perseguição,

de querer pisar a vida com na alma.

Cansaço ontem meu,

hoje chatice das saudades,

por estas ruas varredas

do amor e das fadigas,

tua sombra é a laço que me une aos cemiterios.

Meu corpo é chave dos corredores infinitos,

apenas sinto-me na solidão do mundo,

como um segundo de história anônima,

porque fui ginete das brisas,

e o amador amado entre a noite e a palavra,

fui o amante furtivo da cidade hipoconríaca,

fui uma paragem de malas novas chamado coração,

Porque fui das tuas ruas,

sem abandonar as minhas,

e nos momentos das tuas mãos,

fui um esvoaçar dos tempos,

instante da existência entre papéis,

letargias das auroras nos dedos,

para ter a estatura do amor que você tem amado.

E olha-me aqui,

com a pensada necessidade de usar relógio,

com tua pressa de chegar cedo,

com a contaminação da minha carne,

olha-me aqui como uma multidâo empurrada

para o vicio das repitações,

olham-me aqui, humano e com Deus,

com linguagem,

sonhos,

e direçôes,

olha-me com minha própia humanidade,

reduzida aos cifras do salario.

Se tem dito querer-me alguma vez,

lembra-me o cheiro a ventre de onde venho,

para que cada pisada aborta um coração,

e a alma seja uma janela colgada dos aguaceiros.

Porque antes do rumor,

meu peito foi o deserto

onde começaste a erigir,

acorda-me, pois, como homem,

de entre teus escombros metropolitanos,

porque êsse é todo meu valor,

sem estatísticas,

sem Wall Street,

porque á medida de cada homem,

vai crescendo uma morte,

um desterro dos esquecimentos,

apenas temos sido,

sem saber que já não somos,

Somos destas ruas e distos povos,

somos destas mortes,

e distos heróis,

das guerras rotineiras

que asomâo em cada amanhecer.

Homem,

êste alento dos dolares e chaminé,

não é o alento da existência,

êste pulso dos trens e dos horários,

não é a batida do amor.

Homem,

teu espelho não é o cristal frente ao qual te pentea,

teu espelho é outro homem pelas ruas.

Para viver,

amar,

respirar,

ser rua dos ventos,

e das solidões que armão ao silêncio,

deixar além da existência marcas que sangrão sonhos,

ser a quotidianidad,

ou o absurdo,

na costume a um chefe,

e o respeito aos salários,

e ocupar toda a vida,

assim, vivendo instantes,

com um Deus que nos escuta,

misérias e fracasos.

lunes, 25 de febrero de 2008

De Corazón Hacia.../Del Libro De Corazón Hacia/Otto Oscar Milanese

De Corazón Hacia.../Del Libro De Corazón Hacia/Otto Oscar Milanese



Estoy donde debo estar,
recluído en mi propio corazón.
Ya no soy la sombra ni la luz,
importa mas sentir, ser, percibir,
ser todo lo que me niegas tú.
Mi libertad no es un espacio abierto,
ni un mar que no me quepa en la mirada,
soy libre porque no tengo iglesia,
ni me comprometen las doctrinas,
ni los dogmas corrompen mi alma.

2.
De un lado cáda instante con los que me arropé de vida,
y del otro el rumor quieto de un corazón de hombre,
nadie vendrá a cobrarme las deudas que no debo,
y abonando al silencio mis cosas imposibles,
sabré mirar mi suerte despojado de frustraciones,
y en tanto que echó al viento la cara de mi vida,
la misma vida se limpia de mis débiles raices,
y no sobrevivirá un vagazo de mis penas,
ni ha de quedar un rastrojo que anuncie que he existido,

3.
Presumo que la vida no es tener cuanto se ha querido;
es entregar al viento la dirección del alma,
una calle sitiada por el silencio de la noche,
una esquina que esconde la risa de otros muchachos;
es todo lo que sólo puede tocar el dolor.
Y entonces descubro la nostalgia en mis sentidos
como un manto que arropa mis caídas de hombre.
No me asusta el destino, no me inquieta el azar.
encuentro en toda sombra que vaga
el recuerdo de pasos familiares,
en cada risa de mujer un pasaje a lo infinito.
Me mojo de vida bajo la lluvia repentina,
y entre espalda y camisa la vida oreo al sol,
para andar la fatiga con el corazón de las calles,
percibiendo caminos en el olor de las cosas,
rozándome de vidala boca que en mi boca
no precisó de palabras para decir amor.

4.
Delante, la prisa de un corazón robado a las calles,
detrás, los aullídos de sombras erizados por los días;
duerme el viento en la noche de las cosas perdidas,
que no arrastre ya más lo que en su hora fue amado,
calle y viento, corazones de estos pies que han sangrado
los caminos por donde fui dejando la vida.
Porque siempre tendré el olor que te recuerda
una esquina suspendida del último cigarrillo;
la mirada que abrasa el abrazo del pasado,
la nostalgia del eco que aún nos pinta de amor.
¿Pero cual amor se quedaría unicamente amando?,
sin vestirse de mundo en las ganas de tus ojos,
sin vivir en la moda, en las ofertas, en el calculo,
sin cederle su espacio a la costumbre de vivir.


5.
Silencio y alma se me fueron al mundo
como dos manos ansiosas arrojadas del sueño.
Por todos los instantes alma y silencio ruedan
como dos mitades del corazón de la espera;
rueda alma de hombre sobre un silencio madre
de todo lo que se busca con ojos de vida;
llueve silencio desnudez sobre el afán del alma
de todo lo que duele a busqueda.

6.
A cuanto más el sueño aspira,
más recio golpea el fracaso.
Sueños y fracasos conspiran
para andar con lo que ando,
¿y tú qué sabes de las sombras,
que anda repitiendo el canto?
Cuanto más fue la fatiga,
más se redobló el intento.
Intento y fatiga bastan
para vivir comenzando
con las penas resumidas
en la boca del desencanto.
Y así andan sobre las heridas,
las nostalgias simulando
una esperanza que lucha
para que se arrastre el paso.
Yo también vengo del sueño,
también me arrastró el fracaso,
también viví la fatiga
de miles intentos diarios,
y aquí me tíenes bajo el precio
que estipuló el desencanto.

7.
Puedo relatar estrellas cuando hablo,
mi voz también tomó de la tierra el subterraneo caudal
de los alaridos que me acentúan cada sueño,
y más que por la palabra hueca y vana,
supe llegar al poema conociendo el silencio.
Y así cargué sobre la espalda de la vida,
con cada frase, que si no era la precisa,
al menos fue la mas parecida al rostro
de cada dolor que enamoró mis momentos.
Y así broté entero de mi aliento
como una sombra de hombre para el sol de las rutinas.

8.
Si un día renunciara a la palabra
y escogiera asilarme entre temores,
no sé con cuales ojos tu me vieras,
ni sé con cuales ojos te mirara.
Y siendo así,
¿qué paz habría en mi casa?
Y siendo así,
¿ qué perro nome aullara?
Por eso sólo dame acento y voz
para incendiar el grito que nos calla,
que si hoy la vida late entre los dos
es porque el Verbo ya era entre la nada.

9.
He de ser el silencio cuando duela la palabra
,porque tengo el corazón abierto a todas tus sombras.
Si me habitas, si me vives, si me hieres de rumores,
en todo eco de mi encontrarás lo que eres.
Y he de alzar en mi voz la palabra que mas te ame
para que bebamos la vida en un sorbo de la noche.
Dame siempre sobre el camino un arañazo de sol
que lavaré con luces tus fatigas,
te daré siempre entre los días un día que te enamore.

10.
Dirás que sólo se fue el que intentó vivir en cada frase,
que se quedó la última línea de su cuaderno,
sin el alarde de un verso improvisado;
dirás que alguna vez soñé esa tarde sin mi,
que el beso alado de las horas
vuelve a encarnarme en tus instantes,
que por saber tú como he sentido
un reguero de vida dejarás en mi silencio,
y ni siquiera habrá dolor cuando me dejes,
para descubrir que aún continuo rodando
en el alarido de humanidad que brota de las calles.

11.
Todo lo que tomé de la vida puedo dejarlo sin dolor,
el vestido de olores que desgarra la brisa
en un grito de nada que dibujó cuanto soy.
Tuve una oferta de sensaciones,
el aire, las calles, todo el frágmento de un mundo
que ensambló la emotividad de un corazón.
Mi vida fue el baile
de la sombra sobre el agua...
...El quieto rumor de lo que pasando
crea la ilusión de lo eterno.
Cada momento respirado
fue lo que me hizo.
No me sedujo el futuro
ni me entretuvo el pasado.
Por eso, cuanto siento habla en la boca del viento.
Por eso, cuanto he sido se queda en la misma vida.
Un equipaje de acentos que lloviznan de vivencias
las dos íes de "sufrimiento".