Yo sòlo pido,
Señor,
una pausa en mis avatares de hombre,
sin que se confunda con humildad,
pedir:
un oasis en el desierto de la vida.
Pedir:
sin que se confunda con vencimiento,
un momento a solas con mi propia alma.
Y levantarme, puès, como el Adàn que soy,
mirando la verdad en el vago prresentimiento
de tu PRESENCIA.
¡Oh, mi Dios!,
mira mis dìas como clavos en tus manos,
tù, hijo de Jehova,
el cristo cruxificado de mi infancia,
¿si pediste apartar de ti el càliz?,
¿què podrìa pedir mi miserable humanidad?
viernes, 29 de agosto de 2008
domingo, 3 de agosto de 2008
Momentos y personajes azuanos/Otto Oscar Milanese
Àngel Marìa Canario, "Pijilito":
De un concebido intento de tiranicidio, a General del ejèrcito del tirano que pensò ultimar.
Àngel Marìa Canario, alias "Pijilito", en màs de una ocasiòn tuvo que enfrentar la muerte de cerca. Corriendo ya su fama de hombre temerario, por haber participado en acontecimientos de armas en todas las regiones del paìs, el General Luis Pelletier, deseò gatarle una broma. Entrarìa al terreno de las conjeturas procurar discernir si el General Luis Pelletier deseaba comprobar una vez màs el reconocido valor de su compueblano "Pijilito", o simplemente se trataba de una de las tantas chanzas que se permitìa este, y que tan en consonancia iban con su caràcter. Lo cierto es que un dìa el General Pelletier enviò a buscarle, y una vez apersonado ante èl, le entregò un sobre lacrado, con el encargo de entregarselo personalmente a un oficial con asiento en la ciudad de Barahona. "Pijilito", sin indagar, como todo militar que obedece la orden de un superior, se limitò a cumplir la encomienda. Su sorpresa fue grande cuando al entregar el sobre, y aguardar la respuesta que debìa llevarle al General Pelletier, el oficial se le quedò mirando fijamente, preguntàndole que: "¿Sabe usted lo que se ordena en esta correspondencia?" Turbado, "Pijilito" negò conocer de que se trataba, y quedò estupefacto cuando el oficial le comunicò que en ella se ordenaba se le fusilara inmediatamente. Por suerte para "Pijilito", rapidamente se presentò otro emisario desde la ciudad de Azua, con una carta, aclarando que todo se trataba de una broma, y firmada por el General Pelletier.
En Marzo de 1844, la progenitora del Ganeral "Pijilito", azuana, en estado de gestaciòn, y temerosa de la invasiòn haitiana a nuestro territorio, que entonces estaba en su fase inicial, buscò un lugar màs seguro para traer al mundo a su vàstago, parièndole en Arroy Canasta, un paraje de San Cristobal. Estaba destinado "Pijilito" a retornar a Azua, aùn antes de alcanzar nociòn de las cosas, puès su madre, tan pronto advirtiò cierto grado de normalidad en la situaciòn socio polìtica imperante en el paìs en aquellos tiempos, retornò a su provincia. Y "Pijilito", màs que, y antes que nada, siempre tuvo por orgullo su azuanìa, como todo hombre criado en este caluroso valle en donde el lìmpido azul del cielo por el dìa, y la vasta cantidad de estrellas observables por la noche, fungen ineludiblemente como un sello de dicha condiciòn.
Somos de opiniòn, tras haber escudriñado minuciosamente lo poco que ha escrito sobre la vida de este valeroso y valioso azuano, y esto deberìa tenerlo presente las nuevas generaciones de compueblanos, que su nombre y memoria merecen reivìndicarse, ya que erroneamente siempre se le asociò a las atrocidades perpetradas por Musiè, "Solito", Mandè y Yinito, que si bien, estos, estos, al igual que "Pijilito", pertenecìan al baecista Batallòn "Ligero", no por tanto,, se comportaron de una manera similar, como injustamente, en detrimento de "Pijilito", siempre se ha sustentado.
Lo expuesto en el pàrrafo anterior es avalado por el indiscutible hecho de que "Pijilito" se inicia en el ejercicio de las armas, imbuido de un patriotismo que nunca exhibieron los personajes mencionados, y con los cuales se le involucra antojadizamente. Y es que este azuano tuvo su bautismo de fuego en la Guerra de La Restauraciòn, en la acciòn denominada como "La Canela", en donde con todo derecho, y de acuerdo al valor mostrado en el campo de batalla, alcanzò renombre de hombre corajudo. Baecista y miembro del Batallòn "Ligero", sì, y precisamente, hablando de un hombre que ante todo se sentìa ser azuano, y siendo hombre de armas, resulta inevitable que tomara partido por la roja enseña del baecismo; lo que no significa que apoyara ni cometiera los desafueros que otros tantos cometieron, y que en nombre de esto, se le ligara a aquellos.
Desde su bautismo de fuego en "La Canela", "Pijilito" lucharìa en todas las regiones del paìs, extendièndose por todo el territorio nacional su fama de hombre valiente, que se habìa codeado en combates con los guerrilleros màs notables de su època. Durante un combate en La Vega, viendo como sus compañeros, tras la muerte del jefe de la columna, abandonaban la lucha, sacò el sable, y al grito de "¡Viva Bàez!", se lanzò contra sus compañeros, en un desesperado intento de reorganizar las filas. Luego de ser derrotado en este combate, Ulises Heureaux, "Lilìs", adversario polìtico de Bàez, convocò a "Pijilito". En esta ocasiòn, el azuano presumìa con cuales intenciones se requerìa su presencia; sabìa que su probado baecismo le traerìa complicaciones, y pensando dispararle a "Lilìs", cuando este ordenara que lo apresaran, asistiò al llamado del gobernante. Pero el tirano, hombre de mucho tacto para atraerse a los hombres que consideraba podìan servirle, delante de la tropa formada, lo ascendiò al grado de General. Àngel Marìa Canario, "Pijilito",muriò en 1943. Sus restos descansan en el Cementerio Municipal de Azua.
De un concebido intento de tiranicidio, a General del ejèrcito del tirano que pensò ultimar.
Àngel Marìa Canario, alias "Pijilito", en màs de una ocasiòn tuvo que enfrentar la muerte de cerca. Corriendo ya su fama de hombre temerario, por haber participado en acontecimientos de armas en todas las regiones del paìs, el General Luis Pelletier, deseò gatarle una broma. Entrarìa al terreno de las conjeturas procurar discernir si el General Luis Pelletier deseaba comprobar una vez màs el reconocido valor de su compueblano "Pijilito", o simplemente se trataba de una de las tantas chanzas que se permitìa este, y que tan en consonancia iban con su caràcter. Lo cierto es que un dìa el General Pelletier enviò a buscarle, y una vez apersonado ante èl, le entregò un sobre lacrado, con el encargo de entregarselo personalmente a un oficial con asiento en la ciudad de Barahona. "Pijilito", sin indagar, como todo militar que obedece la orden de un superior, se limitò a cumplir la encomienda. Su sorpresa fue grande cuando al entregar el sobre, y aguardar la respuesta que debìa llevarle al General Pelletier, el oficial se le quedò mirando fijamente, preguntàndole que: "¿Sabe usted lo que se ordena en esta correspondencia?" Turbado, "Pijilito" negò conocer de que se trataba, y quedò estupefacto cuando el oficial le comunicò que en ella se ordenaba se le fusilara inmediatamente. Por suerte para "Pijilito", rapidamente se presentò otro emisario desde la ciudad de Azua, con una carta, aclarando que todo se trataba de una broma, y firmada por el General Pelletier.
En Marzo de 1844, la progenitora del Ganeral "Pijilito", azuana, en estado de gestaciòn, y temerosa de la invasiòn haitiana a nuestro territorio, que entonces estaba en su fase inicial, buscò un lugar màs seguro para traer al mundo a su vàstago, parièndole en Arroy Canasta, un paraje de San Cristobal. Estaba destinado "Pijilito" a retornar a Azua, aùn antes de alcanzar nociòn de las cosas, puès su madre, tan pronto advirtiò cierto grado de normalidad en la situaciòn socio polìtica imperante en el paìs en aquellos tiempos, retornò a su provincia. Y "Pijilito", màs que, y antes que nada, siempre tuvo por orgullo su azuanìa, como todo hombre criado en este caluroso valle en donde el lìmpido azul del cielo por el dìa, y la vasta cantidad de estrellas observables por la noche, fungen ineludiblemente como un sello de dicha condiciòn.
Somos de opiniòn, tras haber escudriñado minuciosamente lo poco que ha escrito sobre la vida de este valeroso y valioso azuano, y esto deberìa tenerlo presente las nuevas generaciones de compueblanos, que su nombre y memoria merecen reivìndicarse, ya que erroneamente siempre se le asociò a las atrocidades perpetradas por Musiè, "Solito", Mandè y Yinito, que si bien, estos, estos, al igual que "Pijilito", pertenecìan al baecista Batallòn "Ligero", no por tanto,, se comportaron de una manera similar, como injustamente, en detrimento de "Pijilito", siempre se ha sustentado.
Lo expuesto en el pàrrafo anterior es avalado por el indiscutible hecho de que "Pijilito" se inicia en el ejercicio de las armas, imbuido de un patriotismo que nunca exhibieron los personajes mencionados, y con los cuales se le involucra antojadizamente. Y es que este azuano tuvo su bautismo de fuego en la Guerra de La Restauraciòn, en la acciòn denominada como "La Canela", en donde con todo derecho, y de acuerdo al valor mostrado en el campo de batalla, alcanzò renombre de hombre corajudo. Baecista y miembro del Batallòn "Ligero", sì, y precisamente, hablando de un hombre que ante todo se sentìa ser azuano, y siendo hombre de armas, resulta inevitable que tomara partido por la roja enseña del baecismo; lo que no significa que apoyara ni cometiera los desafueros que otros tantos cometieron, y que en nombre de esto, se le ligara a aquellos.
Desde su bautismo de fuego en "La Canela", "Pijilito" lucharìa en todas las regiones del paìs, extendièndose por todo el territorio nacional su fama de hombre valiente, que se habìa codeado en combates con los guerrilleros màs notables de su època. Durante un combate en La Vega, viendo como sus compañeros, tras la muerte del jefe de la columna, abandonaban la lucha, sacò el sable, y al grito de "¡Viva Bàez!", se lanzò contra sus compañeros, en un desesperado intento de reorganizar las filas. Luego de ser derrotado en este combate, Ulises Heureaux, "Lilìs", adversario polìtico de Bàez, convocò a "Pijilito". En esta ocasiòn, el azuano presumìa con cuales intenciones se requerìa su presencia; sabìa que su probado baecismo le traerìa complicaciones, y pensando dispararle a "Lilìs", cuando este ordenara que lo apresaran, asistiò al llamado del gobernante. Pero el tirano, hombre de mucho tacto para atraerse a los hombres que consideraba podìan servirle, delante de la tropa formada, lo ascendiò al grado de General. Àngel Marìa Canario, "Pijilito",muriò en 1943. Sus restos descansan en el Cementerio Municipal de Azua.
martes, 6 de mayo de 2008
Me piden escribir/Maria Elvira
Hoy nos sentimos complacidos en invitar a la poetisa argentina Maria Elvira para que uno de sus poemas aparezca en este blog, deseando, que al escribir con tanta sensibilidad como lo ha hecho, siempre atienda a ese llamado que se le ha formulado para que escriba. Gracias, Maria Elvira, por tan hermoso poema.
Me piden escribir.
Maria Elvira
Me piden escribir
hoy, que nado en la nada
y después de leer y escuchar
tan bellos poemas.
Solo deseo quedarme
abrigada entre esos versos
en silencio, sin tropiezo,
dejando que sutilmente
la emoción habite mi alma
Me piden escribir…
solo puedo leer palabras,
las tomaré prestada
para dejar salir
todo mi sentir.
Me piden escribir.
Maria Elvira
Me piden escribir
hoy, que nado en la nada
y después de leer y escuchar
tan bellos poemas.
Solo deseo quedarme
abrigada entre esos versos
en silencio, sin tropiezo,
dejando que sutilmente
la emoción habite mi alma
Me piden escribir…
solo puedo leer palabras,
las tomaré prestada
para dejar salir
todo mi sentir.
domingo, 4 de mayo de 2008
Momentos y Personajes Azuanos/Otto Oscar Milanese
Momentos y Personajes Azuanos.
Otto Oscar Milanes
Si pretendieramos enlazar el nombre de la provincia de Azua a sucesos históricos trascendentales, probablemente de manera espóntanea lo primero que acudiría a nuestra memoria es La Batalla del 19 de Marzo, y algunos nombres de los patriotas que en esta tuvieron destacada actuación. Y es que, primero, por su gran importancia, el 19 de Marzo significó para el incipiente Estado Dominicano, la confianza que requería un pueblo desprovisto de un ejército organizado, frente al que entonces, el ejército haitiano, era considerado como uno de los mas poderosos de América. Y segundo, el azuano desde su nacimiento encuentra sobrados motivos para relacionar su lugar de origen con la gesta del 19 de Marzo. Parques, calles, restaurantes y clubes han tomado el nombre de la referida batalla.
Tomando como punto de referencia la importancia histórica, el valor psicologico, mas que bélico, en aquellos momentos, es innegable que La Batalla del 19 de Marzo ha sido el hecho mas relevante que se haya suscitado en la provincia de Azua; pero no el único. Y resulta ser que nuestra provincia está sobrecargada de historia desde el mismo momento de su fundación en 1504 bajo la gobernación de Frey Nicolás de Ovando. Azua, entonces, mas que una provincia, poseía categoría de región, siendo una de las cinco provincias históricas (Santo Domingo de Guzmán, Concepción de La Vega, Santiago de los Caballeros, Santa Cruz de El Seibo, y Azua de Compostela). Estos hechos históricos y los personajes que en ellos se vieron envueltos, en consonancia con el espiritu que anima a este medio de difusión, resaltar los valores azuanos, pretende esta Columna tomar como objetivo, considerando el desconocimiento que muchas de las nuevas generaciones de compueblanos pudieran tener sobre los mismos, a la vez, que humildemente, pudiera convertirse en aporte cultural destinado a futuras generaciones.
MANUEL MENDEZ: EL AZUANO QUE SOLO COMBATIA LOS MARTES Y LOS VIERNES.
A la muy nombrada época de "Concho Primo", tal como se designa a Moca como "La Patria del Valor", bien pudiera llamarsele "La Éra del Valor".
Tiempos en que el valor personal definía los rangos militares, en un país carente entonces, de un cuerpo militar profesional y organizado. Munuel Méndez, nacido en Pueblo Viejo, Azua, desde muy joven se inclinó a la lucha, y su espiritu combativo lo llevó a participar en la guerra independentista. Mas tarde, ese mismo aliento de hombre de armas, lo arrastra a participar en la guerra de La Restauración.
Una vez afianzada la soberanía nacional, el país aún estaba lejos de conocer la paz. Las guerras intestinas, indubitablemente, provocarían mayor mortandad entre la población dominicana, que las luchas libradas contra naciones extranjeras. Y en esos momentos, como azuano al fin, Manuel Méndez toma el bando del Partido Rojo, lidereado por el Presidente Buenaventura Báez. Era la Azua roja, la Azua de los batallones "Ligero" y "Chavalo", en la que entraba borracho de sangre y alcohol el neibano "Solito", arrastrando detrás de su caballo a hombres andrajosos y hambrientos, atados, y recogidos a todo lo largo del camino de Neiba hacia Azua, para ser entregados bajo la única acusación de "Cacoses" (opositores a Báez y al llamado Gobierno de los seis años) al General Valentín Báez, y ser fusilados en lo que tristemente desde entonces se conoció como "El patibulo de Azua".
Manuel Méndez, baecista con Bàez gobernando o en la oposiciòn,desde sus tiempos en las batallas por la Independencia Nacional,siempre evitò luchar en dìas que no fueran martes o viernes. Nunca se ha conocido la razòn que inducìa al valeroso azuano a pelear unicamente en los dìas señalados; pero aùn con estas limitaciones de tiempo, que èl mismo se impuso, quizàs por supersticiòn, Manuel Mèndez siempre fue un hombre valioso para las distintas causas que defendiò en su vida, hasta que bajo el mandato de Conzalez, el 9 de octubre de1875 fue hecho prisionero en pueblo viejo y conducido a la capital del paìs.
VIDAL MENDEZ, INTEGRANTE DEL FAMOSO BATALLON LIGERO.
A Vidal Mèndez, por su lugar de origen, Azua, y su apellido, nose le debe asociar como familiar de Manuel Mèndez. Ningùn parentesco les ligaba, y si algo existìa en comùn entre estos dos azuanos, eso fue su valor y su entrega a la causa del baecismo. Vidal Mèndez fue integrante del batallòn "Ligero", uno de los dos famosos batallones baecista, el otro era "El Chavalo", que hicieron resonar el grito de¡"Viva Bàez, carajo"! por toda la comarca sureña y el paìs. Pero ese¡"Viva Bàez, carajo"!, que brotò con emociòn de tantos pechos dominicanos, estaba destinado a encontrar su sepultura en 1878, cuando tras asumir Bàez la presidencia por 5ta ocasiòn, en 1876, el baecismo se apaga para siempre. Entonces, Vidal Mèndez, con el baecismo practicamente aniquilado, y el batallòn "Ligero" disuelto, optò por afiliarse a la corriente que tenìa como lider al General CesàreoGuillermo (la tumba del ex presidente del paìs, Cesàreo Guillermo, se encuentra en completo abandono en el viejo cementerio de esta ciudad de Azua), y esta decisiòn alcanzarìa ribetes dramaticos en su existencia.
Cuando aseveramos que la decisiòn de Vidal Mèndez de apoyar aCesàreo Guillermo salpicarìa de dramatismo su existencia, nos amparan tres hechos històricos fundamentales para sostener dicha afirmarciòn.Y es que la vida y destino de un hombre estàn sujetas a pequeñas coincidencias que al entreverarse suman el resultado. Estos acontecimientos històricos fueron:
Primero, luego de extinguido el baecismo, y sumado a las filas de Guillermo, Vidal Mèndez, este ùltimo tuvo que acompañar en Azua a lprimero, para pacificarla, tras las revueltas y disturbios que en esta ciudad ocurrieron, como consecuencia del asesinato de "Memè" Càceres.En esta oportunidad la tarea de Vidal Mèndez fue la de actuar como mediador entre las partes beligerantes, coronando el èxito sus gestiones al restaurar el orden en la ciudad. Sus buenos oficios le valieron que lo ascendieran a General.
Segundo, se encontraba al lado de su lider, cuando este, el 27 de febrero de 1879, se enfrenta por vez primera a Ulises Heureaux,"Lilìs", en la acciòn de "El Porquero", Monte Plata, que fue determinante para que Cesàreo Guillermo perdiera el poder.
Y tercero, al abandonar el mando, Cesàreo Guillermo, y partir a ldestierro, Vidal Mèndez le siguiò. Su destino ya estaba trazado, puès en 1881 regresarìa con su lider, entrando al paìs por Higuey, en donde serìa hecho prisionero, y caerìa como una de las tantas victimas del implacable decreto de San Fernando.
Otto Oscar Milanes
Si pretendieramos enlazar el nombre de la provincia de Azua a sucesos históricos trascendentales, probablemente de manera espóntanea lo primero que acudiría a nuestra memoria es La Batalla del 19 de Marzo, y algunos nombres de los patriotas que en esta tuvieron destacada actuación. Y es que, primero, por su gran importancia, el 19 de Marzo significó para el incipiente Estado Dominicano, la confianza que requería un pueblo desprovisto de un ejército organizado, frente al que entonces, el ejército haitiano, era considerado como uno de los mas poderosos de América. Y segundo, el azuano desde su nacimiento encuentra sobrados motivos para relacionar su lugar de origen con la gesta del 19 de Marzo. Parques, calles, restaurantes y clubes han tomado el nombre de la referida batalla.
Tomando como punto de referencia la importancia histórica, el valor psicologico, mas que bélico, en aquellos momentos, es innegable que La Batalla del 19 de Marzo ha sido el hecho mas relevante que se haya suscitado en la provincia de Azua; pero no el único. Y resulta ser que nuestra provincia está sobrecargada de historia desde el mismo momento de su fundación en 1504 bajo la gobernación de Frey Nicolás de Ovando. Azua, entonces, mas que una provincia, poseía categoría de región, siendo una de las cinco provincias históricas (Santo Domingo de Guzmán, Concepción de La Vega, Santiago de los Caballeros, Santa Cruz de El Seibo, y Azua de Compostela). Estos hechos históricos y los personajes que en ellos se vieron envueltos, en consonancia con el espiritu que anima a este medio de difusión, resaltar los valores azuanos, pretende esta Columna tomar como objetivo, considerando el desconocimiento que muchas de las nuevas generaciones de compueblanos pudieran tener sobre los mismos, a la vez, que humildemente, pudiera convertirse en aporte cultural destinado a futuras generaciones.
MANUEL MENDEZ: EL AZUANO QUE SOLO COMBATIA LOS MARTES Y LOS VIERNES.
A la muy nombrada época de "Concho Primo", tal como se designa a Moca como "La Patria del Valor", bien pudiera llamarsele "La Éra del Valor".
Tiempos en que el valor personal definía los rangos militares, en un país carente entonces, de un cuerpo militar profesional y organizado. Munuel Méndez, nacido en Pueblo Viejo, Azua, desde muy joven se inclinó a la lucha, y su espiritu combativo lo llevó a participar en la guerra independentista. Mas tarde, ese mismo aliento de hombre de armas, lo arrastra a participar en la guerra de La Restauración.
Una vez afianzada la soberanía nacional, el país aún estaba lejos de conocer la paz. Las guerras intestinas, indubitablemente, provocarían mayor mortandad entre la población dominicana, que las luchas libradas contra naciones extranjeras. Y en esos momentos, como azuano al fin, Manuel Méndez toma el bando del Partido Rojo, lidereado por el Presidente Buenaventura Báez. Era la Azua roja, la Azua de los batallones "Ligero" y "Chavalo", en la que entraba borracho de sangre y alcohol el neibano "Solito", arrastrando detrás de su caballo a hombres andrajosos y hambrientos, atados, y recogidos a todo lo largo del camino de Neiba hacia Azua, para ser entregados bajo la única acusación de "Cacoses" (opositores a Báez y al llamado Gobierno de los seis años) al General Valentín Báez, y ser fusilados en lo que tristemente desde entonces se conoció como "El patibulo de Azua".
Manuel Méndez, baecista con Bàez gobernando o en la oposiciòn,desde sus tiempos en las batallas por la Independencia Nacional,siempre evitò luchar en dìas que no fueran martes o viernes. Nunca se ha conocido la razòn que inducìa al valeroso azuano a pelear unicamente en los dìas señalados; pero aùn con estas limitaciones de tiempo, que èl mismo se impuso, quizàs por supersticiòn, Manuel Mèndez siempre fue un hombre valioso para las distintas causas que defendiò en su vida, hasta que bajo el mandato de Conzalez, el 9 de octubre de1875 fue hecho prisionero en pueblo viejo y conducido a la capital del paìs.
VIDAL MENDEZ, INTEGRANTE DEL FAMOSO BATALLON LIGERO.
A Vidal Mèndez, por su lugar de origen, Azua, y su apellido, nose le debe asociar como familiar de Manuel Mèndez. Ningùn parentesco les ligaba, y si algo existìa en comùn entre estos dos azuanos, eso fue su valor y su entrega a la causa del baecismo. Vidal Mèndez fue integrante del batallòn "Ligero", uno de los dos famosos batallones baecista, el otro era "El Chavalo", que hicieron resonar el grito de¡"Viva Bàez, carajo"! por toda la comarca sureña y el paìs. Pero ese¡"Viva Bàez, carajo"!, que brotò con emociòn de tantos pechos dominicanos, estaba destinado a encontrar su sepultura en 1878, cuando tras asumir Bàez la presidencia por 5ta ocasiòn, en 1876, el baecismo se apaga para siempre. Entonces, Vidal Mèndez, con el baecismo practicamente aniquilado, y el batallòn "Ligero" disuelto, optò por afiliarse a la corriente que tenìa como lider al General CesàreoGuillermo (la tumba del ex presidente del paìs, Cesàreo Guillermo, se encuentra en completo abandono en el viejo cementerio de esta ciudad de Azua), y esta decisiòn alcanzarìa ribetes dramaticos en su existencia.
Cuando aseveramos que la decisiòn de Vidal Mèndez de apoyar aCesàreo Guillermo salpicarìa de dramatismo su existencia, nos amparan tres hechos històricos fundamentales para sostener dicha afirmarciòn.Y es que la vida y destino de un hombre estàn sujetas a pequeñas coincidencias que al entreverarse suman el resultado. Estos acontecimientos històricos fueron:
Primero, luego de extinguido el baecismo, y sumado a las filas de Guillermo, Vidal Mèndez, este ùltimo tuvo que acompañar en Azua a lprimero, para pacificarla, tras las revueltas y disturbios que en esta ciudad ocurrieron, como consecuencia del asesinato de "Memè" Càceres.En esta oportunidad la tarea de Vidal Mèndez fue la de actuar como mediador entre las partes beligerantes, coronando el èxito sus gestiones al restaurar el orden en la ciudad. Sus buenos oficios le valieron que lo ascendieran a General.
Segundo, se encontraba al lado de su lider, cuando este, el 27 de febrero de 1879, se enfrenta por vez primera a Ulises Heureaux,"Lilìs", en la acciòn de "El Porquero", Monte Plata, que fue determinante para que Cesàreo Guillermo perdiera el poder.
Y tercero, al abandonar el mando, Cesàreo Guillermo, y partir a ldestierro, Vidal Mèndez le siguiò. Su destino ya estaba trazado, puès en 1881 regresarìa con su lider, entrando al paìs por Higuey, en donde serìa hecho prisionero, y caerìa como una de las tantas victimas del implacable decreto de San Fernando.
martes, 25 de marzo de 2008
Es un cansancio tan viejo/Del Libro Entre Viejos Cuadernos/Otto Oscar Milanese
Es un cansancio tan viejo/Del Libro Entre Viejos Cuadernos/Otto Oscar Milanese
Es un cansancio tan viejo
Otto Oscar Milanese
Es un cansancio tan viejo
que ya mi paso es cansancio,
cansancio de la misma pena
que se convierte en morada.
Es algo que desde siempre
jamas respeta al silencio,
lo que se sufre callado
es grito de carne y huesos.
Lo que por los ojos brota
es fatiga de años
que van conociendo manos
que mueren en lo que tocan.
Que me conozca el cansancio
que ya se ha hastiado de alma
que sin ser dueña del mundo
cree ser ama de todas las cosas.
Porque el dolor está adentro
cuando nadie piensa que duele
las voces que en el silencio
resumen lo que se pierde.
viernes, 14 de marzo de 2008
Reflexión
Reflexión
Otto Oscar Milanese
Yo miro la vida
con mirada profunda
y me pregunto:
¿existirá Dios?
No lo sé,
pero me enseñaron a creer en ti.
Yo miro la vida
con mirada escrutadora
y me pregunto:
¿qué será de mi?
No lo sé,
pero yo mismo me eseñé a creer en mi.
Yo miro la vida
con mirada de angustia
y me pregunto:
¿cómo será el mañana?
No lo sé,´
pero aún sigo estando aquí,
AQUI
AQUI,
aqui en esta tierra de hombres
donde cada cual lucha para si,
he luchado para mi Dios,
hasta en mis dudas,
sin mañana
y sin mi.
Otto Oscar Milanese
Yo miro la vida
con mirada profunda
y me pregunto:
¿existirá Dios?
No lo sé,
pero me enseñaron a creer en ti.
Yo miro la vida
con mirada escrutadora
y me pregunto:
¿qué será de mi?
No lo sé,
pero yo mismo me eseñé a creer en mi.
Yo miro la vida
con mirada de angustia
y me pregunto:
¿cómo será el mañana?
No lo sé,´
pero aún sigo estando aquí,
AQUI
AQUI,
aqui en esta tierra de hombres
donde cada cual lucha para si,
he luchado para mi Dios,
hasta en mis dudas,
sin mañana
y sin mi.
martes, 11 de marzo de 2008
¡Ah, Merengue Dominicano!
¡Ah, Merengue Dominicano!Otto Oscar Milanese
¡Ah, Merengue dominicano,que desde Ñico Lora hasta joseito Mateo,entre la algarabía de las peleas de gallos,y la amargura de la dulce "Caña Brava",has conocido y has hecho bailar el corazón de un pueblo bravo! ¡Ay, Merengue dominicano,que has puesto a bailar las vicisitudes de un pueblo,que se comió a Cabo 'e Vela,y en vez de vela prendió cuaba al cuerpo de Martín muerto!"Y abajo la cama está,el que mató a Cabo 'e Vela"!.. Merengue que yo te siento desde Mateo a Ventura,bailando "La Agarradera",o llamando a "La Patrulla". Merengue que tú también has salido del ingenio"El pique" corta la cañacon la rabia del hermano haitiano hambriento. ¡Ay, Merengue de Viloria y de Dioris Valladares,aún sigo metido "A Lo Oscuro"en un país que hace sus líos, pero no los desata! Merengue de Solano que me ordena "Vayase En Paz, Mi Compay",y en paz ya me voy, pues...aunque pasan años y gobiernos, nada cambia. Merengue que me das palos y los tengo que bendecir,"Palo, Palo, Palo, palo bonito, palo e",palos son los que sufre el dominicano en su país, pero me conformo, Guandulito,porque aunque "Jovinita" celosa no me quiera cocinar,tres mujeres me esperan en la capital. ¡Ay, Merengue que sabe a Tatico,a Cibao y a "Mecedora",a "La Hamaca" de Fernandito,y al "Tolalá" de Viloria! Merengue que aun gimiendo bailasla miseria de mi gente,muriéndose va mi niñoy "Siña Juanica" indiferente. "Voa A Montá Un Molino En La Carretera,Pa Moler Mi Caña De Cualquier Manera"... Pero de cualquier manera,aún sea "Rumbo A Manoguayabo Con Mi Gallito CaneloPa Apostar to lo que tengo",y lo que tengo entre los ojos, Merengue, es la resaca de mi pueblo,el fiao, "Señor Pulpero", luego de gastar los cheles,y por último recurso, "La Yola" en la que me monta la ilusión y el desespero.
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